En cuanto al Nuraghe San Sebastiano, situado en el asentamiento de Gesico, el sitio web del MIbact afirma que
el complejo nurágico consta de nueve torres, tres de las cuales se refieren a las estructuras centrales y seis a los robustos muros antemurarios. Su peculiaridad absoluta es la insistencia directa en sus estructuras de las ruinas de una pequeña iglesia rural, dedicada al santo del mismo nombre y datada a principios del siglo XVII, a cuya fase de uso se refieren once enterramientos hallados en los alrededores del edificio sagrado. En la modesta colina de San Sebastiano también son legibles importantes indicios de ocupación púnica.
Las razones de esta superposición, de la que existen varios ejemplos similares en Cerdeña, podrían ser diversas. Suponiendo que los nuraghi desempeñaran funciones sagradas, se podría hablar de sincretismo religioso y, por tanto, de una cierta continuidad entre paganismo y cristianismo; en caso contrario, del deseo de destruir, ocultar o «someter» el símbolo de una religión pagana anterior.
También se podría plantear la hipótesis, mucho más simple, de la elección conveniente de utilizar una base preexistente y particularmente sólida sobre la que erigir la nueva iglesia.
Las fotos de los nuraghe de San Sebastiano son de Maurizio Cossu y Andrea Mura-Nuragando Sardegna.








