Su Casteddu ‘e Fanaris se alza sobre la colina del mismo nombre, a caballo entre los territorios de Decimoputzu y Vallermosa. Se trata de un complejo nurágico de finales de la Edad del Bronce, compuesto por un imponente torreón central rodeado de ocho torres y un antemuro formado a su vez por cinco torres unidas por una muralla megalítica. Los alrededores y el complejo megalítico necesitarían sin duda una limpieza a fondo y una campaña de excavación acorde con la importancia del yacimiento. Sin embargo, todo el territorio de Decimoputzu merecería una investigación a fondo, por la indudable importancia que tuvo, sobre todo en época nurágica, como atestiguan en particular las armas encontradas en el tesoro de Monte Idda, una colina situada justo al sur del relieve de Fanaris, y en el hipogeo de Sant’Iroxi. De los bronces de Monte Idda, cabe mencionar el informe de Taramelli que los descubrió hace un siglo (1915).
De los hallazgos de Sant’Iroxi y de las espadas sardas en general, el profesor Giovanni Ugas informó en particular en su libro «El amanecer de los nuraghi», del que hemos tomado este extracto:
«Conocemos 13 espadas de arsénico-cobre de la facies de Sant’Iroxi, gracias a los hallazgos del hipogeo situado en el yacimiento epónimo de Decimoputzu. Estas espadas se caracterizan por una hoja perfectamente triangular, un ligero abombamiento medio (…) y un doble filo, por lo que podían utilizarse para apuntar y cortar. En la sencilla base arqueada se observan los remaches para fijar la empuñadura, cuyo número varía de cinco a siete. Un artefacto similar procedente de Maracalagonis indica que este tipo de espada también circulaba en otras partes de la isla…».
Las fotos del complejo nurágico Su Casteddu ‘e Fanaris son de Marco Cocco y Bibi Pinna.











