7a.2 y 7.2: Complejo arqueológico de Monte Baranta en Olmedo y Nuraghe Nieddu en Porto Torres

7a.2 y 7.2: El complejo arqueológico de Monte Baranta, en Olmedo, es parte de un asentamiento ubicado en el borde oriental de la meseta homónima. El complejo incluye un recinto de torres, una muralla que rodea un asentamiento y un círculo megalítico con menhires. El recinto de torres, con forma de herradura, está construido en el borde del acantilado. Su mampostería consiste en dos fachadas: la exterior hecha de grandes losas de traquita, apiladas con la ayuda de grandes cuñas, y la interior construida con piedras más pequeñas, de forma irregular, dispuestas en filas regulares. Las dos paredes están unidas por un relleno de piedras sin elementos de conexión. El recinto define un gran patio abierto cuyo suelo, en su mayoría compuesto de roca natural, presenta áreas regularizadas por piedras. Aproximadamente a 100 metros al noroeste del recinto de torres, en una posición más alta, hay una corta terraza rocosa defendida por una poderosa muralla en la única sección no custodiada. Fuera, a unos metros al oeste de la muralla, hay un círculo megalítico delimitado por unas ochenta losas de varios tamaños, entre las cuales hay algunos menhires, ahora rotos o yaciendo en el suelo. A unos diez metros al noroeste, aislado y aplastado, hay un menhir de casi 4 metros de largo.

El nuraghe Nieddu, en Porto Torres, parece ser una estructura de una sola torre, con un diseño de tholos, y está hecho de bloques de basalto. El plano de la cámara es circular, con tres nichos laterales dispuestos en cruz y una cámara con un nicho de pasillo. El monumento tiene una peculiaridad arquitectónica: la escalera del pasillo no atraviesa el grosor de las paredes de la torre siguiendo un camino en espiral, como es el caso en la mayoría de las instancias, sino que a unos 4.5 metros del inicio, gira a la derecha y luego se dobla a la izquierda, cortando así transversalmente el eje del pasillo. La presencia de bloques alrededor del nuraghe y el descubrimiento de fragmentos de cerámica sugieren la existencia de estructuras residenciales (presumiblemente formando un pueblo).

Las fotos del complejo arqueológico de Monte Baranta, en Olmedo, son de Sergio Melis y Nuraviganne. Las del nuraghe Nieddu, en Porto Torres, son de Marco Piras.