Hablamos de ‘Sa Prejone ‘e s’Orku, en el territorio de Siniscola.
Situada en la ladera noreste de Montalbo, es una de las cuevas de mayor interés arqueológico de todo el territorio, ya que fue utilizada como lugar de enterramiento y culto en época nurágica. Su entrada fue estrechada y adaptada por los nurágicos, que construyeron una empinada escalera, que aún sigue cumpliendo su función después de 3500 años. Al final de la escalera hay una gran sala con una gran estalagmita que conecta con el techo de la cueva. Hay numerosas estalactitas y concreciones que la hacen muy fascinante desde el punto de vista naturalista, pero la evocación de su pasado nurágico es de gran impacto y emoción. Alrededor de los años 80, un proyecto de recuperación del patrimonio arqueológico de la zona de Siniscola, dotó a la cueva de una gran escalera de hierro que sigue presente en la actualidad, cuya función es facilitar la entrada a la sala principal.
Fuente: Visite Siniscola.