<<Al liberar el monumento de los colapsos y del desorden de un rebaño de ovejas superior, las limpiezas y pruebas de excavación en Nuraghe Orrubiu hoy destacan las ruinas relacionadas con el tambor base de un nuraghe clásico de torre única en obra poligonal, con una altura máxima restante de aproximadamente 4 metros, que presenta una cámara interna abovedada en estilo “tholos”, equipada con una pequeña nicho auxiliar, y con una escalera de corredor – desafortunadamente completamente destruida – defendida por un puesto de guardia.
La construcción ciclópea, ya desmantelada en tiempos romanos, debido a la presencia confirmada de cerámica decorada con patrones de “peina” y ciertas formas con bordes “esquinas” típicamente engrosados, puede ser datada en la Edad del Bronce Medio; sin embargo, ahora confirma claramente el reutilización de la estructura, como materiales de construcción, de hasta cinco fragmentos de estatuas-menhir, preexistentes en la zona: dos han sido recuperados de las ruinas; dos insisten, claramente visibles, en los ajustes de mampostería interna, en la esquina norte entre el puesto de guardia y el corredor de entrada y en el jambaje derecho en la salida entre el corredor y el tholos; uno está en su lugar en la fachada oeste de la mampostería externa, a una altura de aproximadamente dos metros…>>
(Enrico Atzeni: “El descubrimiento de las estatuas menhir”; volumen editado por Giorgio Murru, publicado por Cuec – 2004).
En las imágenes: un fragmento de una estatua-menhir de nuraghe Orrubiu; el nuraghe Orrubiu en las fotos de Alessandro Pilia y Marco Cocco.