“Después de un período de dominación vándala (mediados del siglo V-mediados del siglo VI a.C.) en el que Cerdeña fue utilizada como tierra de exilio para no arios del norte de África, durante la dominación bizantina (mediados del siglo VI-siglo X d.C.) los nuraghi, especialmente aquellos donde los ambientes del piso bajo permanecieron cubiertos, fueron utilizados como lugares sagrados y de enterramiento (Lilliu 1990), por ejemplo en Su Mulinu (Ugas, Paderi 1990) y en San Teodoro di Siurgus (Ugas, Serra 1990). Incluso durante este período, el interior de Cerdeña permaneció autónomo, si no libre, razón por la cual algunos autores (Rowland 1992, siguiendo a G. Lilliu 1988) hablan de una fase Barbaricina (fase V) que persiste hasta el final de las cuatro Judicaturas (siglo X-XIV d.C.) y ve una continuidad adicional hasta tiempos modernos en la resistencia de la sociedad pastoral Barbaricina al poder de los estados conquistadores (Pisa y Génova, Aragón/España e Italia) que se sucedieron después de las Judicaturas Sardas. Entre la Alta Edad Media y el Reino de Cerdeña, los nuraghi fueron puntos de referencia privilegiados tanto para trazar las fronteras de los territorios municipales como los distritos judiciales y feudales territoriales, y para identificar los puntos de medición trigonométrica de la agro de la isla.” (de una nota del capítulo XV del libro de Giovanni Ugas “Shardana e Sardegna” – Ed. Della Torre, noviembre de 2016).
Las fotos del nuraghe “San Teodoro” di Siurgus Donigala (también llamado “Cocconi” o “Su Nuraxi” o “Sa Parrocchia”), cerca de la iglesia del mismo nombre, son de Bibi Pinna, Gianni Sirigu y Andrea Mura-Nuragando Sardegna. El nuraghe “Su Mulinu” de Villanovafranca está capturado en las tomas de Andrea Mura-Nuragando Sardegna y Diversamente Sardi.